Las causas porque una mujer solicita una reducción mamaria no solo vienen dadas por una cuestión estética sino que puede venir acompañada por dolores de espalda y de cuello, irritaciones en el pliegue mamario, limitaciones al practicar algún tipo de deporte e incluso problemas psicológicos.
La intervención se realiza en quirófano bajo anestesia general. En cuanto a técnicas a realizar existen muchas, tanto a nivel de incisiones como de técnica quirúrgica. Las incisiones pueden ser verticales o en T invertida en función de la cantidad de tejido mamario a resecar. Su cirujano le explicara lo indicado en cada caso. La duración de la intervención es aproximadamente de 90 minutos y el post operatorio de 24 horas.
Una vez retirado el vendaje colocaremos un sujetador específico y le será dada el alta. Es importante que durante el post operatorio domiciliario no se efectúen esfuerzos con las extremidades superiores.
Los puntos se retirarán durante los 7-10 días posteriores a la intervención y su reincorporación a la vida normal será a las dos semanas aproximadamente.
El seguimiento de la paciente se mantiene durante el año siguiente a la intervención, siendo aconsejable realizar una revisión anual o bianual.